Efectos invernadero
Gases de efecto invernadero en la atmósfera terrestre
Un gas de efecto invernadero (o GEI) es cualquier gas de la atmósfera que absorbe y libera calor, manteniendo así la atmósfera del planeta más caliente de lo que sería en otras circunstancias. Los gases de efecto invernadero más importantes de la atmósfera terrestre son el vapor de agua, el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4), el óxido nitroso (N2O) y el ozono.
Los gases de efecto invernadero se producen de forma natural en la atmósfera terrestre, pero las actividades humanas, como la quema de combustibles fósiles, aumentan el nivel de gases de efecto invernadero en la atmósfera y provocan el calentamiento global y el cambio climático. El Protocolo de Kioto es un tratado internacional para controlar la emisión de gases de efecto invernadero debida a las actividades humanas.
Hay que tener en cuenta que los distintos gases de efecto invernadero permanecen en la atmósfera durante distintos periodos de tiempo y absorben distintas cantidades de calor. El "potencial de calentamiento global" (PCG) de un gas de efecto invernadero indica la cantidad de calor que provoca un gas durante un determinado periodo de tiempo (normalmente 100 años). Partiendo del CO2 como índice 1, el PCA calcula el potencial de efecto invernadero de los demás gases producidos por la combustión. Por ejemplo, 1 kg de metano provoca 25 veces más calentamiento en un periodo de 100 años que 1 kg de CO2. Por tanto, el metano tiene un valor GWP de 25.